Cuando de amores se trata…

«Yo no creo que las márgenes de un río sufran por dejarlo correr”

— Frida Kahlo.

Que maravilla eso de pensar que entre amores y desvelos vivimos, develada vivo entre humos y buenos deseos, pero de amor no hay nada.

Siempre pensé que debe existir un final feliz para esta puta descabellada, tal vez un ser que se enamore de esta cabeza loca y no de mi cuerpo y piel canela, pero aún no sucede.

Supongo que suena cliché que una puta encuentre su amor verdadero, las putas son putas y punto… Andamos sin derecho de amor, dicen por ahí.

Lo cierto es que soy una puta excepcional; me gusta enamorarme de momentos, de mentiras, de placer, de sonrisas, de miradas; vivo enamorada del aire que respira mi vida y eso es lo que me mantiene fuerte en mi profesión… Amo amarlos pero quiero que me amen; extraño la monotonía de ser amada por un solo ser muchas noches, quiero que alguien me vea la cara al despertar y me bese en la boca con dulzura, un besito con sabor a viento, a verdad, a amor…